domingo, 30 de noviembre de 2008

...elregreso...

Volvió sobre sus pasos, arrastrando la maleta y cerrando la puerta de la entrada tras de si. Suspiró, se miró en el espejo y sonrió. El miedo había desaparecido. Recogió su abrigo y subió a su cuarto. Olía todo tan bien, nada que ver con el olor a acaroina de aquel “hotel”. Estaba feliz de regresar a casa, se sentó en la cama y abrió su moleskine roja, anotando en la tapa de la primera pagina: “29/11/08; el mundo comienza a girar de nuevo.”
Miró sonriente el pequeño oso panda de peluche que le habían regalado el día anterior: - “Por fin estamos en casa...”
Bajo al recibidor, palpando las paredes. Cuantos años había pasado lejos de ellas, corriendo, jugando con su hermano, escondiéndose cuando su padre llegaba de trabajar, corriendo delante de la zapatilla de su madre cuando la hacia renegar, las primeras caricias, el primer te quiero, sus últimas lágrimas, su ultima noche; recuerdos ahora tan lejos pero siempre presentes. Ayer todo estaba tan lejos, tan atrás en la memoria. Sin embargo, pensó que debía recuperar el tiempo perdido, y era tan simple como una llamada. Cogió el móvil y marcó aquel número que tenía en mente.
¿Si?
Hola... soy yo – respondió.
Cris... ¿E-eres tú? – tartamudeó al otro lado una voz.
- Si… sigo aquí, como te prometí. 


No hay comentarios: